¿Te animas a hacer algo diferente en verano?
¡Este año, del 3 al 13 de Agosto, tienes la oportunidad!
La experiencia de vivir una semana en Taizé va más allá de lo que de “oídas” sabemos o hemos escuchado acerca de este lugar.
Por su Espíritu Santo, Dios penetra en nuestras profundidades, Él conoce nuestro deseo de responder a su llamada de amor. Así podemos preguntarle: “¿Cómo descubrir eso que Tú esperas de mí? Mi corazón se inquieta: ¿cómo responder a tu llamada?”
En el silencio interior, esta respuesta puede surgir: “Atrévete a dar tu vida por los demás, allí encontrarás un sentido a tu existencia.”
Llegaremos, quizás, a decirle a Dios: “Los días pasan y no respondía a tu llamada. Hasta llegué a preguntarme: ¿tengo verdaderamente necesidad de Dios? Vacilaciones y dudas me hacían alejarme de Ti. Y sin embargo, incluso cuando me creía lejos de Ti, me esperabas. Me tenía por abandonado, y Tú estabas tan cerca de mí. Día tras día, renuevas en mí una espontaneidad para sostenerme en un sí a Cristo. Tu mirada de comprensión hace posible que este sí me lleve hasta el último aliento.”
A lo largo de la existencia, el Espíritu Santo atraviesa nuestras noches interiores y una transfiguración del ser se realiza poco a poco.
En un mundo donde las novedades tecnológicas provocan un desarrollo jamás antes conocido, es importante no ignorar las realidades fundamentales de la vida interior: la compasión, la simplicidad del corazón y de la vida, la humilde confianza en Dios, el gozo sereno...
El Evangelio despierta a la compasión y a una infinita bondad del corazón. Éstas no tienen nada de ingenuas, pueden exigir una vigilancia. Conducen a este descubrimiento: buscar hacer felices a los demás nos libera de nosotros mismos. Y una mirada de amor permite discernir la bondad del alma humana.
Aquello que más nos coge en el Evangelio es el perdón, el que Dios nos da y el que nos invita a darnos los unos a los otros. Incluso abatido y maltratado, Jesucristo no amenazaba, perdonaba. Por su perdón, Él borra lo que está herido en nuestro corazón, a veces desde la infancia o la adolescencia.
Confiarle todo a Él, hasta la inquietud... Y entonces reconocemos que somos amados, reconfortados, curados.
Es posible encontrar a Dios, realmente, en la oración, tanto la que se expresa con palabras como en el silencio. Nada lleva tanto hacia Dios como la oración común, cuando ésta está sostenida por la belleza del canto.
Hay una paz del corazón al comprender que ni siquiera la muerte pone fin a una comunión en Dios. Lejos de conducir a la nada, ella abre el paso hacia una vida eterna donde Dios acoge nuestra alma para siempre.
Incluso cuando haya en nosotros dudas, la presencia del Espíritu Santo permanece, en los días apacibles como en las horas de aridez.
¿No somos acaso nosotros los pobres del evangelio? Nuestra fe humilde basta para acoger su presencia. Y el solo deseo de su presencia vuelve nuestra alma a la vida, sobre la tierra como en la eternidad.
Video sobre Taizé:
Por su parte, el Santuario de Nuestra Señora de Lourdes es un lugar de peregrinación al que se acercan muchas personas de todos los lugares del mundo después de la aparición de la Virgen en 1958 a Bernadette, una niña. Desde entonces, se han dado muchas curaciones de enfermos que han ido a visitar la Gruta de la Virgen y el Santuario. Es una oportunidad de compartir nuestro amor a María con miles de personas, muchas jóvenes, de todo el mundo.
Video sobre el Santuario de Lourdes:
Video con frases del Hermano Roger
Cartas del H. Roger, videos,...
El secreto de Taizé
Cuando proponemos como Delegación esta experiencia a los jóvenes de nuestras parroquias y grupos juveniles, lo hacemos creyendo que tras la internacionalidad, los cantos en idiomas y la interconfesionalidad, hay además, en el espíritu de Taizé, un mensaje muy profundo que puede ser respuesta para el joven de hoy que vive su fe en el mundo.
El mensaje del Padre Roger (fundador de la comunidad de Taizé) y de la comunidad monástica que acoge a miles de jóvenes venidos de todas partes del mundo es además de una experiencia de universalidad, una oportunidad para ahondar en lo que puede ser un camino de reconciliación interior, de sanación y de encuentro con Aquel que es capaz de reconciliar todo lo que está roto y dividido en y entre nosotros.
Queremos vivir esta peregrinación a Lourdes y Taizé no como un simple viaje de verano, un tiempo de vacaciones, ni siquiera por la curiosidad de conocer otras realidades en la Iglesia. Lo queremos vivir como un tiempo de gracia, en el que queremos acompañar a nuestros jóvenes a tener un encuentro con Jesús en profundidad, impregnándonos del espíritu de Taizé en su conjunto, ayudando a los jóvenes, y a quienes participen, a recorrer y tomar en serio el ser instrumentos de reconciliación y de comunión.
LAS 3 PALABRAS CLAVES DE LA ESPIRITUALIDAD DE TAIZÉ:
1) CONFIANZA
«Hoy más que nunca se alza una llamada a abrir caminos de confianza hasta en las noches de la humanidad. ¿Presentimos esta llamada? Los hay que, por el don de sí mismos, dan testimonio de que el ser humano no está abocado a la desesperación. (…) Aunque estemos despojados de todo, ¿no somos llamados a transmitir, por nuestras vidas, un misterio de esperanza a nuestro alrededor?».
Ni las desgracias, ni la injusticia de la pobreza vienen de Dios: Dios no puede más que dar su amor. Y hay un súbito asombro al descubrir que Dios mira a todo ser humano con una infinita ternura y una profunda compasión.
Cuando comprendemos que Dios nos ama, y que ama hasta al más abandonado de los humanos, nuestro corazón se abre a los demás, nos volvemos más atentos a la dignidad de la persona humana y nos preguntamos: ¿cómo preparar caminos de confianza sobre la tierra?
Aunque estemos despojados de todo, ¿no somos llamados a transmitir, por nuestras vidas, un misterio de esperanza a nuestro alrededor?
Nuestra confianza en Dios es reconocible cuando se expresa por el simple don de nuestras propias vidas: es ante todo cuando se vive que la fe se hace creíble y se comunica.
Cuando comprendemos que Dios nos ama, y que ama hasta al más abandonado de los humanos, nuestro corazón se abre a los demás, nos volvemos más atentos a la dignidad de la persona humana y nos preguntamos: ¿cómo preparar caminos de confianza sobre la tierra?
Aunque estemos despojados de todo, ¿no somos llamados a transmitir, por nuestras vidas, un misterio de esperanza a nuestro alrededor?
Nuestra confianza en Dios es reconocible cuando se expresa por el simple don de nuestras propias vidas: es ante todo cuando se vive que la fe se hace creíble y se comunica.
La presencia de Dios es un soplo que llena todo el universo, es un impulso de amor, de luz y de paz sobre la tierra.
2) COMUNIÓN- RECONCILACIÓN
Animados por este soplo, somos conducidos a vivir una comunión con los demás, y somos llevados a realizar la esperanza de una paz en la familia humana... ¡Y que ella irradie a nuestro alrededor!
Por su Espíritu Santo, Dios penetra en nuestras profundidades, Él conoce nuestro deseo de responder a su llamada de amor. Así podemos preguntarle: “¿Cómo descubrir eso que Tú esperas de mí? Mi corazón se inquieta: ¿cómo responder a tu llamada?”
En el silencio interior, esta respuesta puede surgir: “Atrévete a dar tu vida por los demás, allí encontrarás un sentido a tu existencia.”
Llegaremos, quizás, a decirle a Dios: “Los días pasan y no respondía a tu llamada. Hasta llegué a preguntarme: ¿tengo verdaderamente necesidad de Dios? Vacilaciones y dudas me hacían alejarme de Ti. Y sin embargo, incluso cuando me creía lejos de Ti, me esperabas. Me tenía por abandonado, y Tú estabas tan cerca de mí. Día tras día, renuevas en mí una espontaneidad para sostenerme en un sí a Cristo. Tu mirada de comprensión hace posible que este sí me lleve hasta el último aliento.”
A lo largo de la existencia, el Espíritu Santo atraviesa nuestras noches interiores y una transfiguración del ser se realiza poco a poco.
En un mundo donde las novedades tecnológicas provocan un desarrollo jamás antes conocido, es importante no ignorar las realidades fundamentales de la vida interior: la compasión, la simplicidad del corazón y de la vida, la humilde confianza en Dios, el gozo sereno...
El Evangelio despierta a la compasión y a una infinita bondad del corazón. Éstas no tienen nada de ingenuas, pueden exigir una vigilancia. Conducen a este descubrimiento: buscar hacer felices a los demás nos libera de nosotros mismos. Y una mirada de amor permite discernir la bondad del alma humana.
Aquello que más nos coge en el Evangelio es el perdón, el que Dios nos da y el que nos invita a darnos los unos a los otros. Incluso abatido y maltratado, Jesucristo no amenazaba, perdonaba. Por su perdón, Él borra lo que está herido en nuestro corazón, a veces desde la infancia o la adolescencia.
Confiarle todo a Él, hasta la inquietud... Y entonces reconocemos que somos amados, reconfortados, curados.
Nunca en el Evangelio, Cristo invita a la tristeza o a la morosidad. Todo lo contrario, hace accesible un gozo apacible, e incluso un júbilo en el Espíritu Santo.
Un joven africano, que había pasado un año en Taizé, expresaba cómo había descubierto poco a poco un gozo, después de una dura prueba. Cuando tenía siete años, su padre fue asesinado. Y su madre tuvo que huir muy lejos. Decía: “He querido reencontrar el amor de mis padres que me ha faltado desde mi infancia. Entonces, he buscado una alegría interior, esperando encontrar allí fuerza en el sufrimiento. Esto me ha dado la capacidad de salir de la soledad de mi infancia. Me he dado cuenta de la importancia de la alegría para modificar las relaciones cotidianas y para conocer una paz interior”
3) ORACIÓN
Es posible encontrar a Dios, realmente, en la oración, tanto la que se expresa con palabras como en el silencio. Nada lleva tanto hacia Dios como la oración común, cuando ésta está sostenida por la belleza del canto.
Hay una paz del corazón al comprender que ni siquiera la muerte pone fin a una comunión en Dios. Lejos de conducir a la nada, ella abre el paso hacia una vida eterna donde Dios acoge nuestra alma para siempre.
Incluso cuando haya en nosotros dudas, la presencia del Espíritu Santo permanece, en los días apacibles como en las horas de aridez.
¿No somos acaso nosotros los pobres del evangelio? Nuestra fe humilde basta para acoger su presencia. Y el solo deseo de su presencia vuelve nuestra alma a la vida, sobre la tierra como en la eternidad.
Video sobre Taizé:
http://www.youtube.com/watch?v=z_ZK07z4heo
Por su parte, el Santuario de Nuestra Señora de Lourdes es un lugar de peregrinación al que se acercan muchas personas de todos los lugares del mundo después de la aparición de la Virgen en 1958 a Bernadette, una niña. Desde entonces, se han dado muchas curaciones de enfermos que han ido a visitar la Gruta de la Virgen y el Santuario. Es una oportunidad de compartir nuestro amor a María con miles de personas, muchas jóvenes, de todo el mundo.
Video sobre el Santuario de Lourdes:
Algunos enlaces que puedes visitar:
Cartas del H. Roger, videos,...
El secreto de Taizé
Recorrido en imágenes por el Santuario de Lourdes
COSAS PRÁCTICAS:
¿Qué llevar?
- DNI en vigor, o pasaporte (en caso de menores de edad).
- Tarjeta de sanidad europea en vigor, o documento equivalente de tu Seguro Médico que te brinde asistencia sanitaria en la UE.
- Incluir algo de ropa de abrigo: Aunque iremos en pleno Agosto y hará calor la mayoría de los días, normalmente hay alguna tormenta de verano, y por la noche refresca, por lo que una chaqueta, un chubasquero o paraguas, y unos pantalones largos no vienen mal nunca.
- Saco y aislante para dormir.
- Útiles de Aseo: ¡Chanclas y toalla incluidas!
- No mucho equipaje.
¿Y el alojamiento, la comida y esas cosas, qué?
En Taizé están en todo, no te preocupes, el alojamiento es en barracones y tiendas de campaña. Para comer, un “ejército” de cocineros y pinches se encargan de que no pases hambre.
Precio:
- 210 € menores de 30.
- 290 € para aquellos con 30 cumplidos o a partir de 30.
Esto incluye, el viaje de ida y vuelta, comidas en ruta, y alojamiento en pensión completa en Taizé.
(Está previsto hacer conciertos y actividades benéficas para recaudar fondos).
Destinatarios:
- Jóvenes a partir de 16 años.
- Familias jóvenes. (Dormirían en un lugar expresamente preparado en Taizé para familias con sus hijos)
¿Como inscribirse?:
1) Rellena estos datos:
INSCRIPCIÓN AL VIAJE A LOURDES Y TAIZÉ
Nombre y apellidos:
Fecha de nacimiento:
Localidad:
Teléfono:
E-mail:
Parroquia a la que perteneces:
Alergias/ Observaciones:
Los menores de edad deben rellenar también esta autorización y que la firmen sus padres:
AUTORIZACIÓN
Yo ________________________________, con DNI _______________ padre/ madre de __________________________________ autorizo a mi hijo/a a asistir al viaje a Lourdes y Taizé organizado por la Delegación de Juventud de la Diócesis de Mondoñedo- Ferrol del 3 al 13 de Agosto del 2012.
En______________, a ___ de _________ del 2012.
Aclaración y Firma: ________________________
2) Envíalos a este e-mail: deleinxumondonedoferrol@gmail.com
3) Ingresa un primer pago de 50 Euros a este número de cuenta:
2091 - 0215 - 02 - 3040010475 (Caixa Galicia)
(Si finalmente no pudieras venir, se te devolvería el dinero)
¡¡¡La fecha límite para hacer este primer pago es el 24 de Mayo!!!
Para más información, éstos son nuestros datos de contacto:
- Piedad: 625440189/ 981782052
- Mail: deleinxumondonedoferrol@gmail.com
¡Anímate a una experiencia diferente!